A pesar de estar disponible desde hace casi 15 años en Argentina, la banda de 450 MHz nunca pudo hasta el momento despegar ni cumplir con las expectativas generadas. Aunque recién ahora la tecnología avanzó lo suficiente como para hacerla más atractiva.
Como toda frecuencia baja, la banda de 450 MHz tiene la característica de ofrecer mayor cobertura y penetración de obstáculos, aunque al mismo tiempo su capacidad de transporte es menor. Así, si bien tiene un buen alcance geográfico (en teoría de 50 km, pero de unos 15 km en la práctica), lo que demanda de una menor cantidad de radiobases, tiene poca capacidad. Puede alcanzar los 30 Mbps en el laboratorio pero en el terreno este ancho de banda se ubica en alrededor de 1 Mbps por dispositivo. Esto hace que sea poco atractiva para el acceso a Internet de las personas (por más que 1 Mbps es mejor que nada). Pero sí lo es para aplicaciones de IoT donde la posibilidad de cubrir grandes distancias y tener buena penetración son más relevantes que la capacidad. Así, quienes miran a la banda de 450 MHz lo hacen pensando en aplicaciones de IoT en el sector rural, minero o energético.
Más allá de estas consideraciones, también es cierto que la conectividad basada en la banda de 450 MHz ha tenido dificultades para desarrollarse. Su escaso uso a nivel global no le ha permitido lograr las economías de escala que la harían más accesible. La gran pregunta entonces es si el desarrollo del IoT permitirá justificar las inversiones y los costos operativos previstos. Algo que hasta ahora no pudo verificarse.