En busca del ancho de banda

Por lo que sucede en distintos mercados del mundo, evidentemente la demanda por ancho de banda resultó mayor a la prevista para los operadores de redes celulares. El crecimiento del tráfico de datos se está convirtiendo en un dolor de cabeza para los operadores móviles impulsado principalmente por la creciente demanda por smartphones así como por ofertas de banda ancha móvil (módems 3G para notebooks y netbooks). Esta tendencia no da muestras de detenerse sino todo lo contrario, resultando en redes que están siendo llevadas al límite de sus capacidades y más allá, lo que genera quejas de los clientes por la calidad y cobertura de las redes.
Por supuesto, la primera reacción fue mejorar las redes existentes, aunque más allá de una sintonía fina, en general esto involucra no sólo mayores inversiones (ej: aumentar la cantidad de celdas) sino también encontrar espacios para instalar nuevas antenas. Ninguna de las dos resulta fácil ni atractiva.
El siguiente paso fue comenzar a regular el tráfico de datos a través de nuevas aproximaciones al precio del servicio. Así, los planes ilimitados comenzaron una migración hacia convertirse en cosa del pasado para ser reemplazados por abonos con límites, por encima de los cuales el cliente debe pagar un adicional.
El próximo paso parece ser el de desviar tráfico de la red móvil hacia redes fijas. Por supuesto, los fabricantes de infraestructura impulsan la utilización de femtoceldas, debido a que implicaría nuevas ventas de equipamiento a los operadores. Si bien las femtoceldas dan muestras de ir creciendo en forma continua, los operadores están buscando alternativas más baratas. Y aquí el WiFi, otrora el enemigo del desarrollo de los servicios de datos móviles se está convirtiendo en un aliado.
Un prueba de la creciente relevancia del WiFi para los operadores está dada por el anuncio realizado esta semana de que AT&T y Verizon Wireless, los dos mayores operadores móviles de los EE.UU. se incroporaron a la WBA (Wireless Broadband Alliance). Se trata de un grupo que promueve la interoperabilidad entre redes WiFi de operadores. Básicamente, los miembros de la WBA comparten los datos de log-in de sus clientes, permitiendo de esta forma el roaming. Los clientes utilizan su nombre de usuario y contraseña para acceder a los hot spots propiedad de otros operadores. Esto se aplica a las redes WiFi cerradas, como las que tiene Arnet en Ezeiza o Aeroparque, solo accesibles para sus abonados.
Dato de color: Hasta hace un tiempo atrás, Verizon deshabilitaba la funcionalidad WiFi de los smartphones que vendía. Ahora le deben querer poner WiFi a todos.

Acerca del autor

Enrique Carrier

Analista del mercado de telecomunicaciones y nuevos medios, basado en Buenos Aires, Argentina

Por Enrique Carrier

Your sidebar area is currently empty. Hurry up and add some widgets.