El 2012 fue un año que marcó un quiebre en la industria móvil local. Los teléfonos básicos perdieron terreno notablemente, dejaron de ser los dominadores en términos de volumen. Cedieron su lugar a los smartphones, que representaron el 41% de los equipos vendidos. Esto surge del informe “Mercado celular argentino” recientemente publicado por Carrier y Asociados.
El mercado de terminales celulares puede dividirse en tres grandes categorías: básicos, socialphones y smartphones. Los básicos son aquellos orientados a las comunicaciones tanto de voz como de SMS, que pueden incluir cámaras de baja resolución y/o capacidad precaria de reproducción de archivos de audio. No cuentan con aplicaciones comunicación/socialización más allá de la voz y el SMS. Los socialphones que son equipos con teclado QWERTY o touch que, sin ser smartphones, permiten el uso de aplicaciones tales como mensajería instantánea (Whatsapp, Messenger) y/o redes sociales (Facebook, Twitter). Finalmente, los smartphones, que utilizan sistemas operativos más sofisticados (Android, Blackberry OS, Symbian S/60 o superior, Windows Mobile o Phone, iPhone OS, Bada) y aplicaciones nativas, pudiendo realizar más tareas que cualquiera de las categorías anteriores.
Más allá de la explosión de smartphones, resulta interesante observar como en sólo 2 años los celulares mutaron de teléfonos a pequeñas computadoras con aplicaciones que se conectan a Internet (socialphones y smartphones). Los dispositivos con esta capacidad representaron 2/3 del mercado, mientras que en el 2010 ni siquiera llegaban a 1/3 del total. Un crecimiento notable y vertiginoso.
En el gráfico puede observarse claramente cómo se alteró el mix de categorías de terminales en el lapso de tan sólo 2 años. Los básicos pasaron de dominar ampliamente a ser la categoría menos popular y en franca retirada, mientras que los smartphones avanzan hacia ser más de la mitad del mercado para este 2013, luego de haber crecido un 53% el año pasado. En el caso opuesto, los básicos cayeron un 44% en volumen. Esto ocurrió en un contexto donde el total de terminales bajó un 2% en unidades.
Por su parte, los socialphones mostraron un leve crecimiento, de apenas el 5% en volumen. Esta categoría se ve amenazada por la llegada de smartphones de nivel de entrada, superponiéndose en precio, pero con mejores funcionalidades para el caso de los segundos.
Para el 2013 el panorama general de los terminales augura una disminución de los volúmenes totales por la reducción (y en algunos casos eliminación) de los subsidios por parte de los operadores. Pero esto no impedirá que los smartphones se conviertan en la categoría claramente dominante, superando ampliamente a la mitad de todos los equipos vendidos en el año.