En los últimos años se produjo la llegada a Argentina de los servicios de video OTT, que permiten acceder a películas y series en forma legal a través de una conexión a Internet, en un modelo que independiza al contenido de la red. Entre éstos, sin dudas que el más popular, reconocido y emblemático es Netflix. Esto sucedió no sin inquietar a los actuales proveedores de servicios de TV paga (vía cable o satélite), ante la amenaza de que su adopción pudiera implicar una baja en sus abonados, que verían en los OTT una alternativa a sus servicios. No obstante, al menos por el momento, esto no está sucediendo, sino que los OTT están demostrando ser servicios complementarios de la TV paga. Esto surge del informe “La TV en tiempos de Internet – 2013 ”, recientemente publicado por Carrier y Asociados.
Los servicios de video OTT son vistos por la mayoría como un complemento de la TV paga. Esto se debe a que la propuesta de esta última es más abarcadora, incluyendo deportes, noticias y todo tipo de contenidos en vivo, así como una base de series y películas. Esto se comprueba cuantitativamente cuando se observa que la penetración de los servicios OTT es levemente superior en los hogares con conexión a Internet que además cuentan con servicios de TV paga que en aquellos que no lo hacen, tal como surge del informe “Usuario online – 2013”.
No obstante, no todo es complementación. Uno de los principales diferenciales de los servicios OTT es que aportan la posibilidad de consumir bajo demanda, por lo que sí compiten con los servicios adicionales de la TV paga que ofrecen esta funcionalidad. En este caso, la competencia se da por precio y amplitud del catálogo.
También es importante destacar que otro beneficio de los servicios OTT, ampliamente utilizado,es la posibilidad de compartir una misma cuenta entre personas que no habitan en el mismo hogar. Por esta razón, la cantidad de usuarios es notablemente más alta que aquella de abonados. Muchas veces los abonos se comparten.
Para la TV paga, quizás la mayor amenaza no sean los cord cutters, usuarios que abandonan la TV paga ya que satisfacen sus necesidades a través del consumo de material audiovisual accedido vía Internet, legal o ilegalmente. Ésta proviene más de aquellos que nunca pagaron por TV paga. El lento pero seguro recambio generacional en la demanda está dando lugar a un nuevo tipo de consumidor: aquél que nunca contrató servicios de TV (aunque sí lo hicieron sus padres) y que por lo tanto no es alguien que lo dé de baja o “corte el cable”. Este grupo está compuesto por nativos digitales que comienzan a vivir solos y toman decisiones de consumo distintas a las de sus padres. Se trata de veinteañeros que no planean contratar un servicio de TV paga porque siempre accedieron a todo lo que le interesa desde Internet. Inclusive, aunque con deficiencias, contenidos en vivo. El desafío para la TV paga será tener propuestas que se adapten a este tipo de consumidor, distinto del tradicional.