Con el envío para su aprobación en el Congreso del proyecto del Presupuesto Nacional para 2014 se desató toda una discusión, centrándose principalmente en si es realista o no. Más allá de esto (que no es menor pero que no forma parte de la temática aquí tratada), resulta interesante observar lo que atañe al rubro Comunicaciones y cuyo detalle puede ser visto desde aquí.
Bajo Comunicaciones se engloban las transferencias a Arsat, Télam, Radio y Televisión del Estado, AFSCA y la CNC. Y conviene recordar que Arsat tiene a su cargo el despliegue de las redes Argentina Conectada, TDA y Libre.ar. Por eso, hay dos datos que deberían causar preocupación. El monto total presupuestado para el rubro Comunicaciones es de $ 8.186 millones, equivalentes a US$ 1.421 millones a valores de hoy pero serían aún menos habida cuenta de que el presupuesto prevé una devaluación del peso. Para todo lo que hay por delante, no parece mucho. Por otra parte, este monto representa apenas un aumento del 7,7%, por debajo de la inflación estimada por el Gobierno de 10,4% y muy debajo de la estimada por los privados. En otras palabras, hay previsto menos dinero para el área.
Está claro que con un presupuesto que en términos reales será más bajo tanto en pesos como en dólares que el del 2013, difícilmente veamos el año próximo avances en el desarrollo de Libre.ar, si es que ésta decide ir con una red propia, ya sea construyéndola o adquiriéndola. Así los caminos serían una asociación con una o más redes existentes o que Arsat reciba partidas por fuera del presupuesto como consecuencia de una subestimación de los ingresos del Estado. Aunque en función del crecimiento de los gastos en comparación con los ingresos, esta última alternativa parece menos probable. O si se da, no alcanzaría para comenzar el despliegue de una red, más aún considerando que hay otros subrubros bajo el ítem Comunicaciones.
Tal como se plantean las cosas, y a juzgar por los nulos avances registrados en 2013, las alternativas parecen dos: asociarse con un privado que ponga el capital (en cash o en activos, léase red) o que la cosa siga como hasta ahora, sin avances. Se aceptan apuestas.