Impulsados por los servicios convergentes así como por una mayor demanda de capacidad (especialmente donde las tecnologías alternativas son inalámbricas o de ADSL y que por lo tanto no están a la altura de las demandas actuales), los accesos de fibra óptica siguen creciendo en Argentina.
Al cierre del primer trimestre de este año, había alrededor de 700.000 accesos de fibra óptica hasta el hogar. Esto equivale al 8% del total de accesos a Internet, que se ubican en los 8,4 M (según el Enacom).
Las cifras oficiales, provistas por Enacom, no reflejan con exactitud esta situación. Para diciembre de 2018, declara 388 mil accesos de fibra óptica, mientras que únicamente Telefónica declara 392 mil accesos FTTH en sus balances. Y a esto hay que sumarle los de Claro, Iplan y muchas pymes y cooperativas de telecomunicaciones que vienen desplegando fibra hasta los domicilios de sus clientes al hogar desde hace unos años.
Con una economía aún en recesión y el mayor costo de la tecnología por impacto de la devaluación, probablemente este año se produzca una desaceleración en el crecimiento, que igualmente será importante dentro el contexto general, pasando de alrededor de 80% en 2018 a un 35% en el 2019.