AutorEnrique Carrier

Analista del mercado de telecomunicaciones y nuevos medios, basado en Buenos Aires, Argentina

Smartphone mata PC

Reina indiscutida del acceso a Internet durante casi 20 años, la PC está cediendo su lugar central en la conectividad a manos del smartphone, particularmente entre los millennials argentinos (de entre 20 y 32 años). Esto surge del informe “Los millennials y sus consumos tecnológicos – 2016” realizado por Carrier y Asociados.
Sin dudas que el smartphone es EL dispositivo de los millennials. Está siempre a mano y siempre encendido. Es un todo en uno (mensajería, redes sociales, música, video, fotos, mapas, etc.) al tiempo que permite usos que la PC no puede ofrecer. Es además el principal dispositivo de acceso a redes sociales (que todos usan intensamente).
Para los millennials más jóvenes (de 20 a 25 años), el smartphone es el dispositivo favorito, tratándose de una sub generación que tuvo celular desde la más temprana adolescencia. Entre éstos, el smartphone desplazó a la PC como dispositivo elegido. Lo encuentran más fácil de usar, mientras que las PC no tienen apps ni sus tiendas. Para ellos, “todo” está en el celular. Se trata de una generación que en general hizo un uso menos intenso de la PC que los mayores (de 26 a 32 años). De hecho, en su mayoría usan el mail únicamente desde el celular, mientras que los mayores alternan su uso con la PC.
Es necesario tener en cuenta que, por un tema de etapa vital, el de los millennials es un segmento mayormente nómada, por lo tanto, la PC no se adapta a la perfección a su estilo de vida. Así, usan más el smartphone que otro dispositivo, independientemente de que lo prefieran o no. Por estos motivos, combinados con que el smartphone queda obsoleto más rápido y se desgasta más físicamente por el mayor uso, se trata del dispositivo que más se actualiza.
La PC es más valorada por los millennials mayores, evidenciando la brecha intrageneracional. Para éstos suele ser el dispositivo favorito, aunque no el más usado. Su mayor tamaño de pantalla es un atractivo fuerte que lo convierte en el dispositivo ideal para el consumo audiovisual, combinando calidad, tamaño de imagen y privacidad (en comparación con la TV). No obstante, al ser un equipo mayormente estático tiene menos desgaste físico, lo que combinado con que en los últimos años ha tenido mejoras leves, hace que su tasa de renovación haya bajado. Esto de alguna forma confirma la idea de que los mejores años de las PC quedaron atrás.
En resumen, para los millennials el smartphone se ha convertido en un dispositivo imprescindible, combinando el acceso a Internet con la ubicuidad. Esto hace que las PC, otrora centro del mundo conectado, aunque todavía presente, se devalúe. Sin dudas, una mala señal para sus fabricantes y desarrolladores.

Volviendo a cero

En una medida que despertó entusiasmo en general y resistencia sobre todo en los afectados directamente, el gobierno anunció que a fin de marzo de 2017 eliminará el arancel del 35% a la importación de PC, notebooks y tablets. Lo que se busca es hacer un aporte en la mejora del acceso de individuos y organizaciones a la tecnología, impactando en la inclusión digital y en la competitividad de la economía en general.
Cualquiera que haya necesitado acceder a uno de estos equipos y que haya a su vez comparado los precios locales con los internacionales, ya sea cruzando la cordillera o embarcándose en un avión a Miami, se habrá dado cuenta que el costo local de los mismos es escandaloso. Más del doble de lo que cuesta en mercados donde no se aplican semejantes aranceles.
Es importante tener en cuenta que además de permitir un mayor acceso a aquellos segmentos de la población que hoy no pueden afrontar el costo de estos equipos, hay un efecto indirecto no desdeñable. Es que si en vez de pagar de pagar $ 15.000 por una PC, la misma cuesta sólo $ 10.000, ese consumidor (individuo u organización) dispone de $ 5.000 que podrá gastar en otros consumos, favoreciendo indirectamente a otros sectores de la economía que de otra manera no tendría acceso a esos fondos. Esto sin considerar las mejoras en la productividad de los sectores consumidores por un mayor acceso a la tecnología.
Por supuesto, esta medida afecta directamente a las empresas que hoy se encuentran ensamblando en el país, y más particularmente a los puestos de trabajo dedicados al ensamble. Para el resto, con arancel 0 o del 35%, siempre habrá necesidad de gente que se ocupe de la administración, ventas, logística, soporte. Incluso, habrá más demanda de estos perfiles si, como consecuencia del abaratamiento de los productos, crecen los niveles de venta.
La eliminación de los aranceles será además una forma de incentivar a las operaciones locales de las marcas internacionales (caso HP, Dell, Lenovo, etc.) a retomar el ímpetu perdido, generando más competencia y demanda de puestos laborales por el crecimiento de su negocio.
Paralelamente, el gobierno anunció medidas paliativas para las posiciones afectadas directamente por la reducción arancelaria. Para mitigar la transición, el gobierno anunció que habrá subsidios para los desempleados durante nueve meses, capacitación y hasta acuerdos con los nuevos empleadores, para cubrirles hasta el 50% del salario por un año. Adicionalmente, el Estado se compromete a seguir comprando a los fabricantes locales 250.000 computadoras, para el plan Conectar Igualdad. Una forma de sostener la demanda para los productores actuales mientras adaptan su modelo de negocio.
Muchos creyeron ver en esta medida el inicio del fin del régimen de promoción de Tierra del Fuego. Pero en la isla, en materia de electrónicos el fuerte son los celulares y las TV, categorías que quedaron fuera del anuncio. De hecho, el grueso de las PC, notebooks y tablets se ensamblan en el continente, sobre todo en el AMBA (Área Metropolitana de Buenos Aires). Tal es así que el gobierno indicó que el 74% de los puestos de trabajo que se perderán por la medida corresponde a esta región. Funcionarios del Ministerio de Producción afirmaron que no está previsto eliminar los aranceles a la importación de teléfonos celulares y otros equipos que se fabrican en la isla, ya que “ese régimen de promoción fue una decisión geopolítica, que está vigente hasta el año 2023”. Esto se debe más a razones políticas que económicas. Tierra del Fuego viene atravesando un difícil momento económico, por lo que desmantelar el régimen de un plumazo sumergiría a la provincia en un caos de dimensiones desconocidas. Esto no implica que no se busque mejorar la competitividad de la isla. Pero eso es parte de medidas totalmente distintas que deberán consensuarse entre la Nación, la provincia y las empresas allí radicadas.
Desde el gobierno hay muchas expectativas en relación al impulso que esta medida pueda tener en la venta de los equipos alcanzados por la reducción arancelaria. Evidentemente la reducción en el precio de los bienes seguramente impulsará su consumo. No obstante, hay que ser cautos y tener en cuenta que los productos en cuestión se encuentran en una etapa de retracción a nivel mundial. Hoy compiten en atracción y presupuesto con los smartphones. Habrá que ver cuánto pesa el precio de los productos alcanzados por la eliminación del arancel en los volúmenes de venta futuros. Desde el gobierno afirman que la baja en los precios podría alcanzar al 50%. La eliminación del arancel del 35% equivale a una reducción del 26% en el costo del bien importado. Llegar entonces a una baja del 50% implicará también la reducción de otros costos que no fueron identificados.
Resta por ver si esta baja de aranceles significará la muerte de los ensambladores locales. En la década de los 90 también hubo arancel 0 a las computadoras durante varios años, período en el cual empresas locales lograron tener más del 50% del mercado ensamblando equipos con marca propia. Hoy el mercado no es igual, es cierto, pero no significa que no haya oportunidades. Como fuere, se trata de una medida largamente esperada.

Tuits selectos

A mover esos bancos

En un mundo que se desplaza aceleradamente hacia los servicios y contenidos móviles, los bancos están en el grupo que lidera esos cambios. En Argentina la cosa avanza bien, con 1 de cada 4 usuarios bancarizados que tienen un smartphone utilizando banca móvil. Esto surge del informe “Usuario de smartphones 2016” publicado por Carrier y Asociados.
El desarrollo de la banca móvil no convive con otros canales. La mayoría de los usuarios de smartphones opera con su banco vía PC, seguido por el cajero automático (clave para extraer o depositar fondos) y más atrás hay un virtual empate entre quienes van a la sucursal y quienes operan desde el celular. El uso de la banca móvil tiene más aceptación entre los millennials que los demás segmentos etarios.
A la hora de elegir el canal más habitual para operar, domina el acceso vía PC, el cual es mencionado por casi 2 de cada 3 usuarios. Atrás se ubica el cajero automático, utilizado por 1 de cada 2, que permite el input y output de dinero que luego será operado online. Por su parte, entre los usuarios de banca móvil, 1 de cada 4 afirma usarla habitualmente.

Como era previsible, las operaciones más frecuentes en banca móvil son aquellas relativas a las consultas de saldo, así como de últimos movimientos (por ejemplo, para ver si ese depósito ya se acreditó). Éstas son realizadas por el 88% de los usuarios. A continuación se ubican los pagos (sean de servicios públicos, expensas, cuotas de colegios, etc.), realizadas por el 53% de los usuarios. Más atrás aparece lo que es la obsesión del Banco Central, las transferencias entre cuentas, que alcanzan al 34%.

Show me the money

El viaje de los más altos funcionarios del área de Comunicaciones a los EE.UU. para seducir inversores tuvo los elementos necesarios como para ser tema de conversación durante toda la semana. La conjunción de altos funcionarios, directivos de operadores, inversores y periodistas que cubrieron la misión dio mucho material para comentar.
Pasado casi ya el primer año de la gestión del actual gobierno (equivalente a un cuarto del mandato), los avances concretos estuvieron más en la puesta en orden de lo recibido (desactivando conflictos y regularizando toneladas de trámites congelados) que en la generación del marco necesario que incentivara la actividad en el sector. En consecuencia, en el más alto nivel del gobierno hay cierta decepción porque el sector de las comunicaciones no ha generado las inversiones que algunos esperaban. Las grandes telcos siguieron invirtiendo particularmente en 4G (tal como estaba planeado), al tiempo que Cablevisión concretó la compra de Nextel (que venía de antes) y luego se hizo de espectro adquiriendo ISP, pero no hubo mucho más. Este cuasi freezer en el que se encuentra el sector ha sido, además, detonador de sordas internas al interior de un área donde conviven grupos de distinta extracción política y que son más que evidentes para los observadores externos.
En este escenario, las autoridades del sector emprendieron viaje a New York y Washington para intentar persuadir a los inversores de que Argentina es una buena oportunidad para hacer negocios. Y los objetivos no son menores. El propio Aguad habló de llevar la inversión de 0,5% del PBI al 3% en un lapso de 3 a 4 años. Un salto importantísimo que requerirá de nuevas reglas de juego para que se concrete. Algo de lo que las autoridades son conscientes por lo que adelantaron que antes de fin de año habría novedades.
Uno de los puntos, confirmado por el presidente del ENACOM, fue que se fijará en enero de 2018 el momento en que todas las empresas de telecomunicaciones puedan dar servicios de TV. Una inhibición de larga data y que se está pagando en el subdesarrollo de la banda ancha a nivel país [ver “En búsqueda del tiempo perdido” para más detalles].
También se mencionó que está en evaluación la desagregación del bucle local, esto es, permitir que el último tramo que conecta físicamente a un cliente esté a disposición de otras empresas que no sean la dueña de esa red. Este es un punto en el cual si el gobierno decidiera avanzar debería hacerlo con recaudos. En momentos en que Argentina necesita una actualización de su infraestructura, con un fuerte foco en la última milla para poder aumentar las capacidades, una medida de este tipo, implementada deficientemente, podría ser un disuasor a la inversión más que un incentivo. La desagregación tiene sentido en escenarios como los de la post privatización, donde el incumbente era el único con red al hogar. Pero en el escenario actual, donde no sólo llega la red del incumbente sino probablemente también la de algún operador de TV por cable, así como eventualmente un proveedor inalámbrico, la necesidad de apertura de la última milla es menos evidente, y puede desalentar la inversión en red. Lograr un precio de última milla que no desincentive la inversión por parte del dueño de la red y que simultáneamente permita a terceros operando sobre ella una adecuada rentabilidad requiere de un equilibrio de funambulista.
También se mencionó que habrá incentivos para la compartición de infraestructura como paso previo quizás al desarrollo del negocio de las “torreras”, empresas que se ocupan de desarrollar y administrar sitios para la instalación de antenas, en un negocio que tiene mucho de inmobiliario y que está en boga en varios mercados. Una buena medida para evitar la superposición de inversiones y minimizar los tiempos de despliegue.
El gobierno también da sanas muestras de una obsesión por el desarrollo de la fibra óptica, no sólo a nivel de conexiones mayoristas (como hace con Arsat), sino también, y más importante, de fibra hasta el hogar o FTTH (Fiber To The Home). El primer paso obvio es levantar las inhibiciones a la provisión de servicios que la financiarían, algo que ya prometen para dentro de poco más de un año. No obstante, y para no generar expectativas desmedidas, es importante tener presente que no se trata de una empresa fácil. Así lo comprobó Google en los EE.UU. con su proyecto Fiber, en el cual acaba de desistir de llegar con fibra hasta los hogares para pasar en vez a tecnologías inalámbricas de gran ancho de banda. Por esto, el objetivo del gobierno de pasar de un 2% de las conexiones de fibra óptica actuales al 20% en sólo 3 años, parece muy ambicioso: sería más de un millón de accesos.
Un enfoque original expresado por alguno de los funcionarios es que Argentina es atractiva debido a su atraso en infraestructura, lo que abre múltiples oportunidades. No obstante, el “gancho” para los potenciales inversores no es el atraso tecnológico per se (y por lo tanto su potencial), sino que las condiciones que generaron ese atraso no sigan vigentes.
Un dato interesante fue la reunión de la cúpula de las Comunicaciones con sus pares de la FCC (el órgano regulador de los EE.UU.) para intercambiar experiencias. Si bien son mercados muy distintos en su tamaño y desarrollo, Argentina y EE.UU. comparten un rasgo clave, como el de contar con redes de TV por cable desarrolladas y que son una alternativa concreta y de peso a las redes de telecomunicaciones tradicionales. Algo que no sucedió por ejemplo en Europa, referente en regulación para varios en Argentina, donde los países contaban con un único gran incumbente descendiente directo del operador estatal, pero sin una red alternativa como lo es la de los operadores de TV.
Como se ve, es mucho lo que queda por delante por hacer para llegar al tan ansiado despegue de las inversiones en el sector de las telecomunicaciones. El dato positivo es que hay conciencia en el gobierno de que es necesario introducir modificaciones en la regulación para alcanzar los objetivos deseados y sus autoridades están dispuestas a hacerlo. Las próximas semanas seguramente nos depararán novedades al respecto.

Tuits selectos

Depósito de confianza

Pagos móvilesAunque todavía incipiente, el mercado de los pagos móviles es lo suficientemente tentador como para que actores que no son tradicionales del sistema financiero quieran participar de él. Sin embargo, al menos inicialmente, los usuarios argentinos confían más en que la gestión de los pagos móviles sea llevada adelante por las empresas tradicionales del sector (bancos y tarjetas de crédito) en vez de por operadores móviles, proveedores de hardware o cadenas de retail. Esto surge del informe “Usuario de smartphones 2016” publicado por Carrier y Asociados.
 
Gestor de pagos
Con porcentajes de respuestas similares entre los usuarios de smartphones, Bancos y Tarjetas de Crédito se llevan 3 de cada 4 respuestas. La confianza se basa en su know how para proveer el mismo servicio que ya están ofreciendo, aunque con distinta tecnología. La preferencia por los bancos cae en la medida en que desciende el nivel socioeconómico, mientras que las tarjetas de crédito tienen una distribución más pareja.
En una posición intermedia se encuentran las empresas de pagos online, como Mercado Pago o Paypal, mencionadas por el 17% de los encuestados. Éstas tienen mayor aceptación entre los niveles socioeconómicos medios y bajos y entre los millennials. Se trata de segmentos en los que el nivel de bancarización suele ser menor.
A pesar de sus deseos de no quedar fuera de un negocio importante que correrá sobre su infraestructura técnica, los operadores móviles encuentran resistencias. No obstante, su aceptación crece con la edad del usuario, así como en la medida en que desciende el nivel socioeconómico. Adicionalmente, la elección de operadores crece notablemente entre usuarios no bancarizados, donde aparentan tener la mayor oportunidad.
El caso de los fabricantes de hardware es interesante, porque, aunque todavía no funcionan en Argentina, tanto Apple como Samsung tienen sus propias soluciones de pagos móviles. Y si bien funcionan asociadas a actores del mercado financiero, esto deberá ser muy explícito para no generar desconfianza en las mismas.
 

Haciendo la vertical

AT&T-Time WarnerJusto al día siguiente a que se abordara desde aquí la evolución de los contenidos como factor clave [ver “Content is King 2.0”], en EE.UU. se anunció una mega operación por la cual el operador convergente AT&T adquiere al generador de contenidos Time Warner por US$ 85 millardos (mil millones). Ya no alcanza con ser dueño de la red. También hay que poseer lo que fluye por la red (aunque sea una parte).
Como toda gran operación, la misma será revisada en detalle por el regulador. Sin embargo, ya se metió en la campaña electoral para presidente. Ambos candidatos se mostraron “revisionistas” como consecuencia de las preocupaciones respecto a una “sobreconsolidación” del mercado. Clinton se mostró inclinada a revisar a fondo (no podía decir otra cosa), mientras que Trump fue más preciso y dijo oponerse directamente, ya que acuerdos de este tipo “atentan contra la democracia”.
El de AT&T-Time Warner no es el típico caso de consolidación en una industria. O, como bien lo explicó el CEO de AT&T, se trata de una integración vertical y no horizontal. Lo que hace AT&T vendría a ser como adquirir un proveedor, no un competidor. Por lo tanto, se trata de una operación con características similares a la que llevó tiempo atrás Comcast (el principal operador de triple play de los EE.UU.) al adquirir NBC Universal en 2011 y que fuera aprobada. Además, parece menos conflictiva que la adquisición realizada tiempo atrás de DirecTV, lo que sí produjo una consolidación en el mercado de TV paga. Conviene aclarar que el acuerdo no incluye al operador triple play Time Warner Cable.
No obstante, existen temores que esta integración vertical termine resultando en un trato preferencial por parte de AT&T hacia los contenidos de Time Warner en relación a otros, como Netflix, por ejemplo. Esto no implica que AT&T decidida no ofrecer productos de Time Warner (como HBO) a otros operadores con el objetivo de lograr un contenido diferencial a su propuesta convergente y atraer así nuevos clientes a su plataforma. Estaría en todo su derecho, aunque habría que ver si económicamente tal decisión sería favorable.
Claro que hay una forma de privilegiar contenidos propios más sutil, y que tiene que ver con el video móvil. Se trata de un contenido cada vez más relevante, a tal punto que desde Facebook prevén que para el 2021, el 70% del tráfico de datos móviles será video, creciendo del 50% actual. Y en este sentido, AT&T acaba de sentar un precedente al anunciar que el tráfico del servicio DirecTV Now (la versión OTT de la programación) no se contabilizará dentro del paquete de datos incluido en el abono. De esta forma sí establece un trato preferencial a sus propios contenidos, reflotando entonces la discusión sobre la neutralidad de la red.
Si la operación finalmente se concreta, se estaría revirtiendo la historia. Quizás el mayor impacto de Internet en materia de contenidos fue independizar a los contenidos de la red. Algo que el hombre quiere volver a unir.

Tuits selectos

Madurando los pagos móviles

Pagos móvilesEn momentos en que el Banco Central apura la adopción de los pagos electrónicos, incluyendo el uso de celulares, los usuarios o público en general son permeables a su adopción. Un 30% de los usuarios de smartphones está dispuesto a usar el celular como medio de pago tan pronto como esté disponible, mientras que un 49% lo haría luego de esperar a que se masifique. Esto surge del informe “Usuario de smartphones 2016” publicado por Carrier y Asociados.
La intención de uso en general crece en la medida en que lo hace el nivel socioeconómico, al tiempo que la adopción inmediata sería más alta entre hombres que mujeres. En cuanto a los usos más atractivos para los pagos móviles, figuran en primer lugar comercios (77%), locales gastronómicos (72%) y transporte público (71%). Taxis y remises (60%) siguen en el cuarto lugar, un poco más lejos, pero considerando que se trata de servicios menos masivos que los anteriores, la adopción en estos casos sería más alta. Idéntica situación se da en el caso de estacionamientos y peajes (59%).
 
Usos atractivos para pagos móviles
 
Los usos mencionados indican que en la mente de los usuarios se abre la posibilidad no sólo de complementar sino también de sustituir medios de pago existentes. Mientras que en comercios y locales gastronómicos suele estar disponible la alternativa de tarjetas de débito y crédito, en los casos de transporte público en las grandes ciudades hay medios de pago específicos, como la tarjeta SUBE en el AMBA. Algo similar ocurre con los peajes, aunque su uso está menos difundido salvo entre los “viajeros frecuentes”. Distinto es el caso de estacionamientos, taxis y remises. En estos últimos no llama entonces la atención que, en el caso de Uber, uno de los beneficios esgrimidos por la empresa y por sus usuarios es el pago electrónico. Un llamado a la modernización que a veces, por hábito o por motivos económicos y fiscales, no se quiere oír.
Con este escenario, el 2017 se presenta como el año del despegue de los pagos móviles en Argentina, un país donde la disposición a su adopción se presenta mayor entre los usuarios que entre la oferta, todavía incipiente.

Your sidebar area is currently empty. Hurry up and add some widgets.