Siguiendo con los cambios en la comercialización de contenidos que generó primero la digitalización y luego la distribución por las redes electrónicas, esta semana se conocieron datos que son de interés para la industria discográfica. Es que el videojuego Rock Band (una suerte de karaoke extendido a los instrumentos y competidor de Guitar Hero) facturó únicamente en los EE.UU. mil millones de dólares desde su lanzamiento. Pero esto no es todo. También vendió 40 millones de tracks (que se agregan al juego a razón de unos US$ 2 por tema), de su catálogo de sólo 614 canciones de 269 artistas diferentes. De esta forma, generó más ingresos que ningún otro juego en aquél país y evidencia que todavía se puede vender música, aunque de forma distinta a la tradicional.