Con motivo de los cuestionamientos a ciertas candidaturas, la justicia da muestras de seguir anclada en el mundo de los átomos. Para acreditar su residencia en el distrito por el cual se postula, una de las personas cuestionadas tuvo que presentar las guías telefónicas en papel, al tiempo que no fueron consideradas facturas de servicios porque no estaban selladas, siendo que las mismas estaban adheridas al sistema de débito automático. ¡Un upgrade a la derecha! (o izquierda, no hay problemas ideológicos).