¿Inflexión o veranito?

No es ningún secreto que este año las ventas de celulares vienen más flojas que las del 2008. En el acumulado de importaciones de los tres primeros trimestres del 2009, la caída es de un 16% respecto del año anterior. Sin embargo, el análisis de las estadísticas siempre permite distintas perspectivas, y la duda que surge es si se está produciendo un cambio de tendencia. Es que mientras las caídas trimestrales comenzaron en el 3° cuarto del año pasado, en el actual este mismo período marca un repunte, que se ubica un 10% arriba.


Considerando que el crecimiento neto de líneas en uso se encuentra en niveles que se acercan al vegetativo, este aumento estaría indicando una recuperación en la renovación, la cual había sido postergada en un escenario de recesión e incertidumbre económica y política.
Más allá del escenario menos incierto de la actualidad, también ayuda en esta recuperación la proliferación de terminales con nuevas y deseadas características, como la reproducción de música (que condenó al ostracismo a los reproductores de MP3 dedicados), la grabación de video y, más recientemente, las capacidades ampliadas de mensajería instantánea y el acceso a redes sociales.
Justamente, la aparición de nuevos equipos con funcionalidades para el uso de Messenger y Facebook están haciendo cada vez más borrosa la línea que divide a los smartphones del resto de los equipos. Quizás esta sea una de las razones por las cuales esta última categoría no crece como se esperaba, acumulando una caída anual del 12%.
En este escenario, es notable el crecimiento de Blackberry, quien encabeza en participación de mercado en el 2009, con un aumento del 55% en unidades vendidas respecto del año pasado. De esta forma, desplaza a Nokia, que cayó un 15% en igual período. Así, Blackberry lidera en el 2009 con un 43% de participación, seguido de Nokia con un 38%. Samsung y Motorola, en empate técnico, se ubican después en alrededor del 7% cada uno, y en quinto lugar el “manijeado” iPhone, levemente por debajo del 2%.

Volviendo a las cifras generales, y a pesar de este cambio en la tendencia que se observa en el 3° trimestre, difícilmente pueda llegar a compensarse la caída de la primera mitad del año. Para que esto ocurra, el crecimiento en el último trimestre deberá ser de más del 50%, algo bastante improbable. Con objetivos más modestos pero también más posibles, habría que aspirar a que esta tendencia del trimestre que acaba de terminar se mantenga, quebrando la línea descendente de los últimos cuatro quarters. Claro que falta ver cuál será el impacto del más que probable impuesto tecnológico.

Acerca del autor

Enrique Carrier

Analista del mercado de telecomunicaciones y nuevos medios, basado en Buenos Aires, Argentina

Por Enrique Carrier

Your sidebar area is currently empty. Hurry up and add some widgets.