La evolución del OTT

El avance en el consumo de servicios OTT de video, que pasó en un año del 55% al 66% de los usuarios de Internet en Argentina, no sólo implica un avance cuantitativo, sino también esboza un cambio cualitativo en cuanto a las motivaciones para hacerlo. Esto surge del informe “Internet y consumo audiovisual -2017”, realizado por Carrier y Asociados.
Dentro de los motivos para consumir servicios de video OTT, la posibilidad de ver temporadas completas de series (y, por qué no, hacer “maratones”) sigue encabezando la lista, con un leve avance respecto del año anterior.
Donde más crecimiento se observa es en la posibilidad de ver los contenidos en múltiples pantallas y en la percepción del servicio como económico. La tendencia a ver video en otras pantallas está alimentada por la masificación de los smartphones (cada vez con pantallas de mayor tamaño) y un avance de las tablets. Esto sin olvidar el sostenido crecimiento de las Smart TV que simplifican notablemente el consumo de OTT. En cuanto al tema precio, y más allá de la comparación con un servicio de TV paga (por cable o satelital), el hecho que en el caso de Netflix (por lejos el OTT más popular) el mismo esté en dólares y el valor de éste haya estado estancado por mucho tiempo, hizo que el costo relativo del abono fuera bajando. Quizás una de las razones por la cuales Netflix esté ajustando sus tarifas en pesos en estos días.
Otro dato interesante es el crecimiento de quienes consumen OTT por no tener TV paga. Esto no necesariamente implica un avance en similar magnitud del temido “cord cutting”, pero sí que los OTT pueden ser un sustituto o al menos un paliativo para aquellos que no están abonados a la TV paga.

Donde los OTT parecen haber perdido algo de terreno es en la selección de contenidos. Es que los OTT compiten en la profundidad de los contenidos (más series, más películas) pero no tanto en la diversidad (deportes, música, etc.). Esto da para pensar que hay lugar para otros OTT más segmentados o, en el otro extremo, agregadores de todo tipo de contenido (en una propuesta similar a la de Flow).
Los motivos mencionados permiten prever que la TV paga, en los casos en que se haya aggiornado, tendrá más elementos para pelear. Aquí hay que pensar no sólo en el caso de Flow sino también de las propuestas que harán, a partir de 2018, tanto Telefónica como Claro, donde la alternativa de un producto OTT antes que IPTV (por la inversión y tiempos de despliegue que demanda) no debería descartarse. En cualquier caso, una propuesta de TV moderna incluirá temporadas completas y multipantalla, tendrá una selección más variada de contenidos y podrá llegar a consumidores sin TV paga. El precio, será algo por definir.

Acerca del autor

Enrique Carrier

Analista del mercado de telecomunicaciones y nuevos medios, basado en Buenos Aires, Argentina

Por Enrique Carrier

Your sidebar area is currently empty. Hurry up and add some widgets.